Carta abierta del consejero de Educación al profesorado en el Día Mundial del Docente
5 de octubre. Día Mundial del Docente
El futuro de una sociedad es fruto de su educación. Y en ella, el profesorado juega un papel determinante. Por eso, el ejercicio de la docencia, el trabajo que desempeñáis cada día, necesita ser cada vez más reconocido, más apreciado y más querido.
Para quienes valoramos la educación como uno de los mayores bienes que puede poseer una persona, no hay nada más necesario que rendir un sincero homenaje y dedicar unas palabras de agradecimiento, en un día como hoy, a aquellas personas que se entregan a la labor de la enseñanza, con esfuerzo y con dedicación absoluta.
La profesión docente comparte algunas características comunes con el resto de los trabajos que se desarrollan en la sociedad. Sin embargo, su ejercicio encierra una cualidad muy especial que debemos reconocer: educar a alguien no es tanto hacerle aprender algo que no sabía, sino hacer de él alguien que, en cierto modo, no existía. Ese poder de transformación constituye la responsabilidad y la grandeza de vuestra labor.
En cada uno de nosotros o nosotras, sea cual sea la tarea que cumplimos en la sociedad, dejó una huella tan hermosa como imborrable un maestro o una maestra que nos ayudó a ser, en buena medida, lo que hoy somos como personas.
Sois la piedra angular del sistema educativo. Todo avance o mejora, necesarios, requiere de vuestra implicación, motivación y participación. Por ello, la sociedad andaluza, sus representantes y el propio Gobierno andaluz os va a seguir ofreciendo todo su respaldo.
La sociedad está en deuda con vosotros y vosotras. Habéis sido los protagonistas necesarios en el proceso de extensión del derecho a la educación y ahora, en el actual proceso de mejora y extensión de la calidad, sois sencillamente imprescindibles.
Cada día os implicáis en una nueva realidad educativa, con alumnos y alumnas de todas las características sociales, económicas y culturales. Asumís con enorme entrega la diversidad de vuestro alumnado, atendiendo por igual a quienes son distintos. Ponéis al servicio de la sociedad vuestro talento y vuestra calidad humana.
Habéis aceptado de forma diaria y con éxito que los centros educativos acaparen la mayor parte de responsabilidad en la conciliación familiar. Y ahora, incluso os hemos pedido que os adaptéis a los vertiginosos cambios tecnológicos que nos ha tocado vivir.
En definitiva, os hemos encomendado lo más importante que tiene una sociedad, nuestros niños y niñas, nuestro futuro. Vosotros y vosotras habéis respondido de la mejor manera posible. Por eso, merecéis ser los servidores públicos mejor valorados y por eso, merecéis recuperar todo el prestigio y reconocimiento que os corresponde ante la sociedad a la que honradamente servís.
Gracias por estar ahí.
Francisco José Álvarez de la Chica
Consejero de Educación